Se acerca la esperada Navidad, la época ideal para disfrutar de los exquisitos dulces en familia, ya que las reuniones familiares, las largas horas de charla en la sobremesa, los juegos con los niños, no serían lo mismo sin la degustación de los dulces típicos navideños.

Existe una gran variedad y uno de los dulces por excelencia que les encanta a los niños es el turrón, en especial el de chocolate. También están los mazapanes, bombones, roscón de reyes, polvorones, etc.

Es normal que durante esta época del año los niños quieran comer de todo, pero su organismo se puede resentir, así que hay que tener algunos tips en cuenta:

• No se recomienda comer ningún tipo de dulce ni chocolate antes de los 12 meses. Se recomienda que empiecen a ingerir este tipo de alimentos a partir de los 2 años, ya que muchos de ellos están elaborados con huevos y frutos secos.
• Si se le ofrece un trocito de turrón, es mejor que sea uno blando o de chocolate para que el niño pueda desmenuzarlo y a su vez tragar sin ninguna problema y evitar atragantamientos.
• Para evitar los excesos y empachos es recomendable no dejar a  la vista ni a su alcance las bandejas que los contengan, así se puede controlar cuanto van comiendo,  y sacarlas solo después de las comidas. Si tienen acceso a ellas como están tan ricos y tienen un envoltorio tan llamativo posiblemente estarán continuamente “picando” y mas tarde no querrán comer.
• Una buena idea es hacer dulces navideños caseros con ingredientes naturales, así podemos adaptarlos a las necesidades de la familia. Además aprovechando los días festivos es un buen momento para entrar en la cocina con los niños. Cocinar también es jugar, aprender algo nuevo, una forma exquisita de educar. Enséñales a hacer turrón casero, tronco de Navidad, roscón de Reyes, galletas, etc. También puedes aprovechar la ocasión para contarle que aportan los ingredientes de estos postres navideños que tanto les gustan.
• De todos modos si alguna vez come demasiado, ofrécele de postre algún plato atractivo a base de fruta, como una macedonia, brochetas de fruta, etc.

Nosotros somos su espejo, es una buena excusa para comer con moderación, darles ejemplo y cuidarnos también los adultos.